Un sorpresivo vuelco dio la causa por el asesinato de Nora Dalmasso, luego de que el informe del FBI revelara la existencia de dos nuevos ADN completos que no se corresponden ni con los sospechosos, ni con las otras 27 personas que pasaron por la escena del crimen 26 de noviembre de 2006. Tras 18 meses de silencio absoluto en la causa, se sumó este elemento fundamental para el esclarecimiento del crimen.
El informe reveló que aparecieron “dos nuevos códigos genéticos” que no se condicen con ninguna de las muestras analizadas.
Los dos nuevos ADN aparecidos no se corresponden ni con el linaje Macarrón, ni con Gastón Zárate, el pintor conocido como el “Perejil”.
El informe pericial realizado por el FBI comenzó a ser traducido en el Palacio de Tribunales 1, de la ciudad de Córdoba.
De la diligencia participaron el fiscal de la causa, Javier Di Santo, cuatro peritos designados por la fiscalía y dos de parte, uno en representación del imputado Facundo Macarrón, hijo de la víctima, y otro de Gastón Zárate, el pintor también acusado del hecho.
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