La Unión Europea (UE) investigará si los proveedores de Internet del Viejo Continente bloquean indebidamente aplicaciones para la web, tales como los servicios de comunicación on line Skype, Talk de Google y Facebook, y si la velocidad de las conexiones se ajusta a lo que ponen los contratos de servicios.
El objetivo no es otro que proteger los derechos de los ciudadanos de la UE a un acceso “justo” a los servicios de Internet.
“No está bien reducir la velocidad de Skype o servicios similares. Es contrario a la competencia.
No está bien estafar a los consumidores con la velocidad de Internet”, comentó una funcionaria.
Se trata, agregó, de “garantizar que los ciudadanos y las empresas de la UE puedan disfrutar los beneficios de un Internet abierto y neutral, sin restricciones ocultas y a la velocidad prometida por los proveedores”.
Comments are closed.