Al aire

Reflexión

“Aquel día me desperté con mucha flojera y renegando. Con trabajo pude deshacerme de las cobijas. Me dirigí al baño arrastrando las piernas mientras maldecía el tener que levantarme de la cama sin poder quedarme en ella todo el día. Desayuné con los ojos tan cerrados como mi mente. Tal pereza de dominaba, que por no meter el pan en el tostador, preferí comerlo frío y beber la leche directamente de la botella. ¿porque tener que trabajar? ¡esa si era una verdadera maldición…”

363 Comments

Comments are closed.

También te puede interesar...

ActualidadAl aireNacional

El terror de los sicarios: Rosario Bajo la Sombra del Narcotráfico

En los últimos meses, la ciudad de Rosario se ha sumido en...

ActualidadAl aireInterés general

El arte de hacer rodar la pelota en el césped perfecto

En el mundo del fútbol profesional, cada detalle cuenta. Desde el más...