Luego de la publicación en el Boletín Oficial de Entre Ríos, la Ley N° 10.867 prohíbe la “exhibición, oferta, publicidad y/o promoción de alimentos y bebidas ultraprocesados a una distancia no inferior a cinco metros de las filas y líneas de cajas registradoras, accesos y salidas de supermercados, hipermercados, y otros comercios de la modalidad autoservicio, como así también las farmacias; con el objeto de disminuir la prevalencia e incidencia del sobrepeso, obesidad, diabetes y otras enfermedades crónicas no transmisibles en la población”.
En el artículo 2°, la ley explica qué se entiende por “ultraprocesados” a aquellos productos industrializados que cuentan con altos niveles de azúcares, sodio, grasas saturadas y grasas trans, alcanzando los rubros como golosinas, galletitas dulces y/o saladas, cereales azucarados, snacks, productos de panadería y pastelería, gaseosas, jugos en polvo y bebidas con alto contenido de jarabe de maíz de alta fructuosa, bebidas energizantes, sopas y postres en polvo o envasados, entre otros.
La nutricionista Juliana Pulido, explicó en Radio 9 a qué nos referimos cuando hablamos de ultraprocesados y su opinión sobre esta Ley.
Los alimentos ultraprocesados son “aquellos que su gran porcentaje contiene grasas saturadas o hidrogenadas. Las grasas hidrogenadas es todo aquello que contiene margarina. Como bien sabemos, la margarina es mucho más barata que la manteca, entonces esos alimentos ultraprocesados, llámense alfajores, galletitas, chocolates contienen más margarina que manteca. Ese es uno de los nutrientes críticos de los ultraprocesados. También otro nutriente crítico, hablando de los ultraprocesados sería el azúcar y el sodio, muchas veces nosotros nos fijamos en lo que son las grasas y quizás lo vamos a encontrar por ahí, bajos en grasas saturadas, (y uno dice ‘ay bueno genial, no está tan mal) pero cuando vemos las grasas trans tiene muchísimo y por ahí no nos explicamos eso, es justamente porque esos alimentos tienen margarina en vez de manteca”.
Estos productos generan mayor dependencia, cuenta Juliana. Por los tipos de nutrientes que tienen, nos generan más placer al consumirlos; la combinación de grasa y azúcar provoca en nuestro cerebro el “placer puro”. Esto mismo sucede con la combinación de grasa y sal: “nos genera una sensación de liberación, de algo que uno lo está disfrutando”, agrega la profesional.
“Lo que hace esta Ley, es justamente tratar de regular el consumo, de que no esté tan a mano”.
Juliana Pulido – Nutricionista
Juliana pide “no olvidarse” de las gaseosas gluco carbonatadas como Coca-Cola, Sprite, Fanta que provocan la necesidad de consumir ese producto en particular. Esto sucede “porque la combinación de sus componentes, de la cantidad de azúcares que tiene, de la cantidad de bicarbonato, de la cantidad de macro y micro nutrientes, son de modo tal que nos genera una sensación de placer a nivel de nuestro cerebro. Entonces es como que necesitamos eso específicamente”.
La Ley 10.867 busca “disminuir el consumo de alimentos ultraprocesados que, como bien sabemos, su consumo diario está íntimamente relacionado con la principal enfermedad cardiovascular que es una de las principales causas de muerte en nuestro país; llámese hipertensión arterial, infarto o ACV. También las enfermedades crónicas como Diabetes”.
“Estamos viendo debut diabético en niños y en gente cada vez más joven”
Juliana Pulido – Nutricionista