“Sin darnos cuenta usamos palabras, duras e hirientes. Palabras que pueden afectar o herir susceptibilidades y que muchas veces no es realmente lo que quisiéramos decir. Debemos pensar antes de soltar la lengua para evitar que salga toda la agresividad y la acidez que hay en nuestro interior y hagamos daño a las personas que nos rodean. Seguramente se puede decir lo mismo de manera que no dañe y así nos evitaremos muchos problemas….”
Comments are closed.